Dentro de los skills más valorado en el mundo ejecutivo es la alta capacidad resolutiva. Una mentalidad acertada para resolver problemas es lo que distingue a los grandes tomadores de decisiones de aquellos que no saben lo que están haciendo y no tienen correctamente adiestrada esta habilidad.
Esta mentalidad impulsa a los ejecutivos de las organizaciones a desarrollar sus habilidades para la toma de decisiones a fin de acelerar su transformación en “máquinas” para resolver problemas. Este tipo de líderes ven los problemas como oportunidades para controlarlos e incidir en estos en manera de solución.
Un factor que permite profundizar en la toma de decisiones es el autoconocimiento: comprender cómo reaccionamos emocionalmente ante distintas situaciones.